miércoles, 23 de marzo de 2011

PUBLICIDAD Y ETICA



En una sociedad de mercado donde miles de productos y servicios luchan por hacerse un hueco en la "conciencia colectiva" de los ciudadanos-consumidores, la publicidad se ve como una necesidad. Publicitar el producto es una condición sine qua non para que pueda competir con sus adversarios a la hora de ser elegidos. A veces sucede que un buen producto, superior en prestaciones a sus adversarios, ha desaparecido del mercado por no haberse realizado una buena publicidad del mismo. También ocurre lo contrario: malos productos que con una publicidad adecuada han triunfado sobre adversarios más cualificados. Al estudiar el fenómeno de los efectos de la publicidad tenemos la obligación de relacionarlo con los fenómenos socioculturales. No tenemos que olvidar que el estudio de la publicidad está íntimamente ligado y relacionado con las ciencias sociales y psicológicas. Y uno de los fenómenos más importantes es el consumo. La única forma de entender la publicidad es comprender primero el fenómeno del consumo, y como ha evolucionado pasando de una sociedad basada en el ahorro, a una sociedad de consumo basada en la compra exacerbada de cualquier producto y servicio. De ahí la importancia del estudio de la publicidad como elemento más visible y relevante de la sociedad de consumo.
Existen muy pocas empresas dedicadas a la publicidad que pongan reparos éticos globales, tanto en lo que publicitan como en la forma de hacerlo. En cierto modo hay como un sentimiento de "neutralidad moral" en relación a las consecuencias que su trabajo pueda tener sobre los ciudadanos aspirantes a consumir el producto o servicio publicitado. De este modo, nos encontramos con empresas que lo mismo hacen publicidad para consumo de alcohol y tabaco como para campañas contra el consumo de drogas ilegales.
Ante este estado de cosas, y en sintonía con todo un movimiento preocupado por introducir la ética en las actividades y comportamientos cotidianos de los ciudadanos —banca ética, comercio justo, consumo responsable…—, proponemos un nuevo tipo de publicidad: UNA PUBLICIDAD CON ÉTICA (UPCE)


Una publicidad con ética deberá basarse en dos principios fundamentales: el de la veracidad y el de la solidaridad. Esto se expresa en:
  • La publicidad no debe ser nunca engañosa, ni "por obra" ni "por omisión"; tanto en el mensaje como en la forma de transmitirlo;
  • La publicidad buscará siempre aportar algo positivo a la convivencia entre los seres humanos, y de estos con su entorno, el planeta;
  • Por tanto quedará excluido de ser publicitado todo aquello que de una u otra manera, directa o indirectamente, fomente la degradación física o moral del ser humano, el enfrentamiento de unos contra otros, o el deterioro del medio ambiente.      
 para entenderlo bien, os pongo unejemplos de publicidad poco ética: 








Y la semana que viene el papel de la mujer en la publicidad.

miércoles, 16 de marzo de 2011

el publicista universal: El "efecto GUGGENHEIM"

el publicista universal: El "efecto GUGGENHEIM"

El "efecto GUGGENHEIM"

Simbolo cultural de Bilbao, de Bizkaia y de todo Euskal Herria, en general. el Guggenheim 
ofrece una imagen moderna cosmopolita y vanguardista del territorio en el que se encuentra,
además, tiene un gran posicionamiento a nivel internacional dentro de la oferta cultural, 
sería lo primero que citaría cualquier persona que se dispone a visitar Euskal Herria.
Es innegable el “efecto Guggenheim”, que ha logrado poner a Bilbao en el mapa, pero no hay que quedarse estancado en él. Ahora es momento de buscar nuevas oportunidades para la propia ciudad, el turismo y la hostelería, que pueden venir de acontecimientos relevantes que se organicen tanto en el ámbito cultural, deportivo como empresarial.

En nuestra ciudad, el cliente de negocios aún supera al cliente de turismo, pero en los últimos años el turista ha tenido un incremento espectacular respecto al de empresa. El motivo es que el propio Bilbao se está reconvirtiendo hacia una ciudad de servicios que cada vez quiere más turismo.
Hace diez años, antes de la inauguración del Museo Guggenheim, la ocupación era de un 10% de turistas y un 90% de empresa. Ahora este porcentaje se ha igualado en casi al 50% para cada uno de los grupos. Entre otros factores, esta variación también ha venido influida por la mejora en las comunicaciones. Un único ejemplo puede ilustrar este cambio: hace una década no había 7 aviones que conectaran Bilbao con Madrid a diario con unos precios tan ajustados. Todo ello ha conseguido que mucha gente haga trayectos de ida y vuelta en la misma jornada, sin necesidad de pasar noche en la capital vizcaína. Esta facilidad en el transporte, al mismo tiempo, ha ayudado a animar a otros colectivos a acercarse a Bilbao, gracias a las numerosas conexiones directas con las que cuenta el aeropuerto de Loiu.
Paralelamente a este aumento de visitantes, Bilbao y sus alrededores ha experimentado en esta última década un incremento, aún mayor, del número de plazas hoteleras, que ha llegado a duplicarse. Se trata de un crecimiento no sólo cuantitativo sino también cualitativo ya que el cliente es cada vez más exigente. Esta competencia obliga a toda la hostelería a mantener su alto nivel con una renovación y mejora de su instalaciones casi constante.

Efecto Guggenheim-Internet

Hay dos claves en el cambio de la hostelería en Bilbao: uno particular, el llamado “efecto Guggenheim”, y otro que ha afectado al sector en cualquier parte del mundo, la implantación y acceso generalizado a Internet.
El Museo Guggenheim consiguió poner a Bilbao “en el mapa”, y sigue siendo un importantísimo referente para los turistas. Prácticamente todos los hoteles de la zona cuentan con un “paquete Guggenheim” en el que se incluye alojamiento, desayuno y entradas para la pinacoteca. Y es mucha la gente que lo contrata.
El Guggenheim es un verdadero icono de la ciudad y es de esperar que dure mucho como tal, sin embargo el objetivo de que Bilbao siga creciendo en el ámbito turístico no debe centrarse sólo en este museo, ya que personas que llegan no sólo vienen por el Guggenheim, aunque se trate de una vista obligada. Debe existir otra oferta para que el propio referente siga siendo atractivo y que, en consecuencia, este “efecto llamada” se mantenga en el tiempo.
Internet ha influido muchísimo con elementos como la reserva online, la confirmación inmediata y la posibilidad de actualizar continuamente las tarifas en función de la ocupación, de la demanda, etc. En general, ha facilitado el acceso a los servicios turísticos a muchas personas que antes no tenían esa posibilidad tan directa, porque la única opción era acudir a una agencia de viajes. Hoy desde la pantalla de ordenador cualquiera puede acceder a toda la oferta hotelera de cualquier ciudad, con una enorme diversidad de tarifas incluso dentro de un mismo hotel. Esta variedad no existía antes ya que, en general, únicamente se tenía de una tarifa para empresas y otra para agencias, divididas en fin de semana o laborables.

¿Hacia dónde?

El futuro para Bilbao como destino tanto de turismo como de encuentros de negocios pasa por una innovación en la que debe tener en cuenta qué se ofrece y a quién se ofrece.
Así, empiezan a generalizarse propuestas “empaquetadas” donde se incluye, bajo un precio cerrado, el alojamiento combinado con otras actividades lúdicas o relacionadas con la salud. El objetivo es recoger la petición de un creciente número de personas que no sólo desean una habitación sino que demandan una “experiencia” bien organizada.
Por otro lado hay que abrir nuevos mercados potenciales para Bilbao a través de acciones de promoción “in situ” en aquellas ciudades con conexión directa con la capital vizcaína. Además, es importante hacer hincapié en las posibilidades de Bilbao como sede de grandes eventos intentando fortalecer los ya existentes, como por ejemplo el Bilbao Live Festival, y materializar nuevas propuestas, que pueden venir desde el ámbito cultural, deportivo o de los negocios.


jueves, 10 de marzo de 2011

un inmejorable ejemplo de lo que es la CREATIVIDAD (con mayusculas)

Durante el verano de 1968, en las Olimpíadas de México, Dick Fosbury revolucionó el mundo del atletismo tras ganar la medalla de oro gracias a un nuevi estilo: Fosbury saltó el listón de espaldas en lugar de frente.  Durante toda la historia del salto de altura, cuando un atleta debía saltar un listón situado por encima de su cabeza, corría hacia él y lo superaba de frente.Cuando en 1968 le tocó el turno a este chico de Portland llamado Fosbury el mundo entero se quedo boquiabierto. Su salto no dejó a nadie indiferente: el público aplaudia entusiasmado al ver triunfar al joven con su estilo revolucionario,los propios jueces no sabían si había violado alguna norma o no; los restantes atletas no salian de su asombro ante una forma de saltar completamente nueva; . Cuatro años después, 28 de los 40 competidores en salto de altura copiaron el estilo Fosbury durante las olimpiadas de Munich 72. Hoy, absolutamente todos los saltadores de elite lo usan.
El salto de Dick Fosbury, sirve perfectamente para explicar lo que significa el concepto de creatividad. Es el mejor ejemplo que se puede encontrar.
¿Por que?
Porque el salto de Fosbury hace las tres cosas que debe hacer cualquier trabajo creativo.

1.- ALGO DISTINTO;  Debe ser algo nunca hecho antes, algo nuevo.
2.- LO HIZO MEJOR.; Debe mejorar todo lo anterior, debe ser mejor que las técnicas anteriores. Si Fosbury hubiese saltado 1,5 metros estariamos hablando del mayor ridiculo de la historia.

3.-SE CONVIERTE EN NORMA; A partir de Fosbury todos los atletas saltan como él, se convierte en la nueva manera, en la nueva tendencia. Gracias a Fosbury y su idea creativa se llega mas alto hoy en dia en el salto de altura, gracias a él se ha podido batir la marcas.



http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=FogWW147dBk




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